
Tipos de grasas, ventajas e inconvenientes
Para mantener una buena dieta el secreto está en la cantidad de alimentos que tomamos al día, y por supuesto controlar qué tipo de grasas comemos.
Los dietistas recomiendan tener un equilibrio de grasas para no perjudicar nuestra salud.
Cuando nos ponemos a dieta, el primer enemigo que encontramos son las grasas, y es lo que intentamos quitarnos cuando queremos bajar de peso haciendo ejercicio y dieta.
Aunque también hay que decir que no todas las grasas son perjudiciales, ya que algunas tienen también algún beneficio para nuestra salud.
Las grasas en los alimentos
Las grasas tienen muchas más calorías que otros nutrientes, y es por esta razón por lo que se tienen que consumir con moderación para evitar la obesidad o el sobrepeso.
Los alimentos al contener grasas, les aportan un sabor a nuestras comidas más agradable y más bueno, ya que sin ellas los alimentos serían insípidos y ya no nos gustarían tanto.
Las grasas tienen un alto valor nutritivo combinados con una serie de nutrientes llamados liposolubles, que al combinarse, lo absorbe mejor nuestro organismo como algunas vitaminas.
Muchas de las grasas que comemos provienen de alimentos que no son buenos para nuestra salud y nuestra dieta alimentaria, como pueden ser los embutidos, pizzas, bollería, carnes rojas, bolsas de patatas fritas o similares, etc…
Comer muchos de estos alimentos no es beneficioso para nuestra salud, ya que no sólo nos hace engordar, sino que puede aumentar nuestro colesterol o tener algún trastorno cardiovascular.
Sin embargo hay otros alimentos que podemos comer que contienen grasas pero son beneficiosas para nuestra salud, como el pescado azul, los frutos secos o el aceite.
Grasas mono y Poliinsaturadas
Este tipo de grasas son las que se recomiendan comer, ya que reducen el índice de colesterol llamado LDL que es el colesterol malo, y que nos ayudan a mantener nuestro colesterol bueno que es el llamado HDL.
Por este motivo se recomienda comer por lo menos 2 veces por semana pescado azul, para ayudarnos a tener a raya a nuestro colesterol, además de que el pescado azul contiene omega 3 que es muy beneficioso para nuestra salud.
Además de comer frutos secos y consumir aceite de oliva y de semillas que también son beneficiosos para nuestra salud.
Grasas saturadas
Este tipo de grasas son las que se recomiendan comer con moderación, ya que elevan el nivel de colesterol y por lo tanto aumenta el riesgo de que tengamos algún problema cardiovascular.
Las grasas saturadas se encuentran en alimentos como la carne roja, los lácteos enteros o los embutidos, que no cree decir que se dejen de consumir, sino que se pueden comer este tipo de alimentos pero con moderación.
Es muy recomendable reducir el consumo de este tipo de grasas durante cada semana, y comer como máximo dos raciones a la semana.
Grasas trans
Este tipo de grasas son las que hay que evitar comer, ya que nos hacen engordar y no son buenas para nuestra salud.
Las grasas trans, son las grasas que habíamos comentado con anterioridad, como las patatas fritas o otros tipos de bolsas de aperitivos, bollería o en algunos precocinados, y que en la mayoría de alimentos son artificiales.
Éste tipo de grasas son muy perjudiciales para nuestra salud ya que puede incrementar nuestro riesgo de sufrir un infarto o tener problemas cardiovasculares.
Muchos alimentos de bollería o repostería contienen este tipo de grasa, ya que se utiliza para mejorar el sabor y la textura de este tipo de alimentos.
Para diferenciar este tipo de grasas de las otras, normalmente en los productos que contienen en su descripción, ya sea en una etiqueta o en la bolsa que contienen esos alimentos, vendrá indicado con el nombre de grasas, ya sean hidrogenadas o parcialmente hidrogenadas.
Mantener una buena alimentación
Para tener una buena alimentación hay que intentar no consumir este tipo de grasas hidrogenadas, y consumir moderadamente las grasas del tipo mono y poliinsaturadas, para así poder tener una dieta equilibrada y mejorar la salud de nuestro cuerpo.
Para bajar de peso recomendamos tener una dieta baja en grasas y intentar hacer ejercicio para poder quemar así las grasas que nos sobran en nuestro cuerpo, ya que con el ejercicio mejoraremos nuestra calidad de vida y nuestra salud.